1 S eñor, mi corazón no es soberbio, ni mis ojos altivos; no ando tras las grandezas, ni en cosas demasiado difíciles para mí;
Jehová, no está envanecido mi corazón, ni mis ojos son altivos; No ando tras grandezas, Ni tras cosas demasiado sublimes para mí.
2 s ino que he calmado y acallado mi alma; como niño destetado en el regazo de su madre, como niño destetado reposa en mí mi alma.
Sino que me he calmado y he acallado mi alma Como un niño destetado de su madre; Como un niño destetado está mi alma.
3 E spera, oh Israel, en el Señor, desde ahora y para siempre.
Espera, oh Israel, en Jehová, Desde ahora y para siempre.