1 ¡ Ay de la rebelde y contaminada, La ciudad opresora!
«¡Ay de la ciudad rebelde, contaminada y opresora!
2 N o escuchó la voz, Ni aceptó la corrección. No confió en el Señor, Ni se acercó a su Dios.
»No escuchó la voz ni recibió la corrección; no confió en Jehová ni se acercó a su Dios.
3 S us príncipes en medio de ella son leones rugientes, Sus jueces, lobos al anochecer; No dejan nada para la mañana.
Sus príncipes son, en medio de ella, leones rugientes; sus jueces, lobos nocturnos que no dejan ni un hueso para la mañana.
4 S us profetas son temerarios, hombres desleales. Sus sacerdotes han profanado el santuario, Han violado la ley.
Sus profetas son altaneros, hombres fraudulentos; sus sacerdotes contaminaron el santuario, falsearon la Ley.
5 E l Señor es justo en medio de ella; No cometerá injusticia. Cada mañana saca a luz Su juicio, Nunca falta; Pero el injusto no conoce la vergüenza.
Jehová es justo en medio de ella, no cometerá iniquidad; cada mañana, al despuntar el día, emite sin falta su juicio; pero el perverso no conoce la vergüenza.
6 “ Yo he exterminado naciones; Sus torreones están en ruinas, Hice desiertas sus calles, Sin que nadie pase por ellas. Sus ciudades están desoladas, Sin hombre alguno, sin ningún habitante.
»Hice destruir naciones, sus habitaciones están asoladas; he dejado desiertas sus calles hasta no quedar quien pase. Sus ciudades han quedado desoladas, no ha quedado ni un hombre ni un habitante.
7 D ije: ‘Ciertamente Me temerás (reverenciarás), Aceptarás corrección.’ Entonces no será destruida su morada A pesar de todo lo que Yo había determinado sobre ella; Pero ellos se apresuraron a corromper todas sus acciones.
Me decía: “Ciertamente me temerá, recibirá corrección y no será destruida su morada cuando yo la visite.” Mas ellos se apresuraron a corromper todos sus hechos.
8 “ Por tanto, espérenme,” declara el Señor, “hasta el día en que Me levante como testigo, Porque Mi decisión es reunir a las naciones, Juntar a los reinos, Para derramar sobre ellos Mi indignación, Todo el ardor de Mi ira. Porque por el fuego de Mi celo Toda la tierra será consumida.
Por tanto, esperadme, dice Jehová, hasta el día en que me levante para juzgaros, porque mi determinación es reunir las naciones, juntar los reinos para derramar sobre ellos mi enojo, todo el ardor de mi ira, hasta que el fuego de mi celo consuma toda la tierra.
9 E n ese tiempo daré a los pueblos labios puros, Para que todos ellos invoquen el nombre del Señor, Para que Le sirvan de común acuerdo.
»En aquel tiempo devolveré yo a los pueblos pureza de labios, para que todos invoquen el nombre de Jehová, para que le sirvan de común consentimiento.
10 D esde más allá de los ríos de Etiopía Mis adoradores, Mis dispersos, Traerán Mi ofrenda.
De la región más allá de los ríos de Etiopía me suplicarán; la hija de mis esparcidos traerá mi ofrenda.
11 A quel día no te avergonzarás De ninguna de tus acciones Con que te rebelaste contra Mí. Porque entonces Yo quitaré de en medio de ti A los que se regocijan en tu orgullo, Y nunca más te envanecerás En Mi santo monte.
En aquel día no serás avergonzada por ninguna de las obras con que te rebelaste contra mí, porque entonces quitaré de en medio de ti a los que se alegran en tu soberbia, y nunca más te ensoberbecerás en mi santo monte.
12 Y dejaré en medio de ti Un pueblo humilde y pobre, Que se refugiará en el nombre del Señor.
Y dejaré en medio de ti un pueblo humilde y pobre, el cual confiará en el nombre de Jehová.
13 E l remanente de Israel no hará injusticia Ni dirá mentira, Ni se hallará en su boca Lengua engañosa, Porque ellos se alimentarán y reposarán Sin que nadie los atemorice.” Júbilo por la Restauración de Israel
El resto de Israel no hará injusticia ni dirá mentira, ni en boca de ellos se hallará lengua engañosa, porque ellos serán apacentados y reposarán, y no habrá quien los atemorice.
14 C anta jubilosa, hija de Sion. Lanza gritos de alegría, Israel. Alégrate y regocíjate de todo corazón, Hija de Jerusalén.
»¡Canta, hija de Sión! ¡Da voces de júbilo, Israel! ¡Gózate y regocíjate de todo corazón, hija de Jerusalén!
15 E l Señor ha retirado Sus juicios contra ti, Ha expulsado a tus enemigos. El Rey de Israel, el Señor, está en medio de ti; Ya no temerás mal alguno.
Jehová ha retirado su juicio contra ti; ha echado fuera a tus enemigos. Jehová es Rey de Israel en medio de ti; no temerás ya ningún mal.
16 A quel día le dirán a Jerusalén: “No temas, Sion; No desfallezcan tus manos.
En aquel tiempo se dirá a Jerusalén: “¡No temas, Sión, que no se debiliten tus manos!”
17 E l Señor tu Dios está en medio de ti, Guerrero victorioso; Se gozará en ti con alegría, En Su amor guardará silencio, Se regocijará por ti con cantos de júbilo.
Jehová está en medio de ti; ¡él es poderoso y te salvará! Se gozará por ti con alegría, callará de amor, se regocijará por ti con cánticos.
18 R euniré a los que se afligen por las fiestas señaladas, Tuyos son, oh Sion, El oprobio del destierro es una carga para ellos.
»Como en día de fiesta apartaré de ti la desgracia; te libraré del oprobio que pesa sobre ti.
19 E n aquel tiempo Me ocuparé De todos tus opresores. Salvaré a la coja Y recogeré a la desterrada, Y convertiré su vergüenza en alabanza y renombre En toda la tierra.
En aquel tiempo yo apremiaré a todos tus opresores; salvaré a la oveja que cojea y recogeré a la descarriada. Cambiaré su vergüenza en alabanza y renombre en toda la tierra.
20 E n aquel tiempo los traeré, En aquel tiempo los reuniré. Ciertamente, les daré renombre y alabanza Entre todos los pueblos de la tierra, Cuando Yo haga volver a sus cautivos ante sus ojos,” Dice el Señor.
En aquel tiempo yo os traeré; en aquel tiempo os reuniré, y os daré renombre y fama entre todos los pueblos de la tierra, cuando levante vuestro cautiverio ante vuestros propios ojos, dice Jehová.»