Salmos 141 ~ Salmos 141

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1 J ehová, a ti he clamado; apresúrate a mí; Escucha mi voz cuando te invocare.

Oh Señor, a ti clamo, apresúrate a venir a mí. Escucha mi voz cuando te invoco.

2 S uba mi oración delante de ti como el incienso, El don de mis manos como la ofrenda de la tarde.

Sea puesta mi oración delante de ti como incienso, el alzar de mis manos como la ofrenda de la tarde.

3 P on guarda a mi boca, oh Jehová; Guarda la puerta de mis labios.

Señor, pon guarda a mi boca; vigila la puerta de mis labios.

4 N o dejes que se incline mi corazón a cosa mala, A hacer obras impías Con los que hacen iniquidad; Y no coma yo de sus deleites.

No dejes que mi corazón se incline a nada malo, para practicar obras impías con los hombres que hacen iniquidad, y no me dejes comer de sus manjares.

5 Q ue el justo me castigue, será un favor, Y que me reprenda será un excelente bálsamo Que no me herirá la cabeza; Pero mi oración será continuamente contra las maldades de aquéllos.

Que el justo me hiera con bondad y me reprenda; es aceite sobre la cabeza; no lo rechace mi cabeza, pues todavía mi oración es contra las obras impías.

6 S erán despeñados sus jueces, Y oirán mis palabras, que son verdaderas.

Sus jueces son lanzados contra los costados de la peña, y oyen mis palabras, que son agradables.

7 C omo quien hiende y rompe la tierra, Son esparcidos nuestros huesos a la boca del Seol.

Como cuando se ara y se rompe la tierra, nuestros huesos han sido esparcidos a la boca del Seol.

8 P or tanto, a ti, oh Jehová, Señor, miran mis ojos; En ti he confiado; no desampares mi alma.

Porque mis ojos miran hacia ti, oh Dios, Señor; en ti me refugio, no me desampares.

9 G uárdame de los lazos que me han tendido, Y de las trampas de los que hacen iniquidad.

Guárdame de las garras de la trampa que me han tendido, y de los lazos de los que hacen iniquidad.

10 C aigan los impíos a una en sus redes, Mientras yo pasaré adelante. Petición de ayuda en medio de la prueba Masquil de David. Oración que hizo cuando estaba en la cueva.

Caigan los impíos en sus propias redes, mientras yo paso a salvo.