E ntonces Faraón envió, y he aquí que del ganado de los hijos de Israel no había muerto uno. Mas el corazón de Faraón se endureció, y no dejó ir al pueblo. La plaga de úlceras
E Faraó mandou ver, e eis que do gado dos israelitas não morrera sequer um. Mas o coração de Faraó se obstinou, e não deixou ir o povo.
Continue reading Report error