P ero los danitas le respondieron: «Ya deja de gritarnos. No vaya a ser que alguno de nosotros pierda la paciencia y te mate, junto con toda tu familia.»
Y los hijos de Dan le dijeron: Que no se oiga tu voz entre nosotros, no sea que caigan sobre ti hombres fieros y pierdas tu vida y las vidas de los de tu casa.
Continue reading Report error