E l día que un ejército extranjero llevaba cautivo a su ejército, y gente extraña entraba por las puertas de Jerusalén y sobre ella echaba suertes, tú estabas allí, en primera fila; ¡tú eras también uno de ellos!
Zu der Zeit, da du wider ihn standest, da die Fremden sein Heer gefangen wegführten und Ausländer zu seinen Toren einzogen und über Jerusalem das Los warfen, da warst du gleich wie deren einer.
Continue reading Report error