E n la ciudad se escuchan los gemidos del moribundo, y claman las gargantas de los heridos de muerte, pero Dios no escucha su oración.
فِي المَدِينَةِ يَئِنُّ النّاسُ، وَحَناجِرُ المَجرُوحِينَ تَستَغِيثُ صارِخَةً، لَكِنَّ اللهَ لا يَنتَبِهُ إلَى صَلاتِهِمْ.
Continue reading Report error