Y el parecer de las langostas era semejante á caballos aparejados para la guerra: y sobre sus cabezas tenían como coronas semejantes al oro; y sus caras como caras de hombres.
Las langostas tenían el aspecto de caballos preparados para la guerra; en la cabeza llevaban algo parecido a una corona de oro, y sus caras eran semejantes a los rostros humanos.
Continue reading Report error