Q uando os habitantes da ilha viram a cobra agarrada na mão de Paulo, disseram uns aos outros: “Certamente este homem é assassino, pois, tendo escapado do mar, a Justiça não lhe permite viver”.
Cuando los lugareños vieron que la víbora pendía de su mano, se dijeron unos a otros: «Con toda seguridad este hombre es un homicida, pues logró escapar del mar, pero la justicia lo ha alcanzado y no lo dejará vivir.»
Continue reading Report error