C ada panela de Jerusalém e de Judá será separada para o Senhor dos Exércitos, e todos os que vierem sacrificar pegarão panelas e cozinharão nelas. E, a partir daquele dia, nunca mais haverá comerciantes no templo do Senhor dos Exércitos.
Y toda olla en Jerusalén y Judá estará consagrada al Señor de los ejércitos, y todos los que se presenten a ofrecer sacrificios las tomarán para cocer en ellas la carne. Cuando llegue ese día, no habrá más mercaderes en la casa del Señor de los ejércitos.
Continue reading Report error