H acia donde el espíritu diera que anduvieren, andaban; hacia donde diera el espíritu que anduvieren, las ruedas también se levantaban tras ellos; porque el espíritu de los animales estaba en las ruedas.
Wo der Geist sie hin trieb, da gingen sie hin, und die Räder hoben sich neben ihnen empor; denn es war der Geist der Tiere in den Rädern.
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