أ بْعِدْ عَنِّي ضَجِيجَ أغانِيكَ، فَلَنْ أستَمِعَ إلَى عَزفِ قِيثاراتِكَ.
Aparta de mí el ruido de tus cánticos, pues no escucharé siquiera la música de tus arpas.