ا لشِّرِّيرُ يُغَيِّرُ مَلامِحَ وَجهِهِ، أمّا الصّالِحُ فَواثِقٌ مِنْ طَرِيقِهِ.
El hombre impío endurece su rostro; Mas el recto ordena sus caminos.