ك َلِماتُ الإنسانِ مِياهٌ عَمِيقَةٌ، وَنَبعُ الحِكْمَةِ نَهرٌ مُتَدَفِّقٌ.
Aguas profundas son las palabras de la boca del hombre; Y arroyo revertiente, la fuente de la sabiduría.