أ مّا قَصْدُ اللهِ فَإلَى الأبَدِ يَدُومُ. خُطَطُهُ تَبقَى جِيلاً بَعْدَ جِيلٍ.
El consejo del Señor permanece para siempre, los designios de su corazón de generación en generación.