ه ُوَ الَّذِي يُحَرِّكُ الجِبالَ دُونَ أنْ تَعلَمَ، وَيَقلِبُها عِندَما يَغضَبُ.
En su furor, hace polvo las montañas, y nadie sabe quién las hizo añicos.